
Sign up to save your podcasts
Or


Según un tratado de 1944 entre México y Estados Unidos sobre el suministro mutuo de agua, ambos países deben compartir las aguas de los ríos Bravo y Colorado. Trump ha asegurado que México le debía agua a su país. Para saldar esa deuda, México se comprometió a realizar entregas inmediatas de agua a su vecino. Para el profesor de hidrología Alfredo Granados Olivas de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, entrevistado por RFI, el hecho de que no se haya renegociado ese Tratado 'es un éxito de la negociación'.
México adeuda el 70 % de los 2.156,6 millones de metros cúbicos que está obligado a entregar en ciclos de cinco años, argumentando largos períodos de sequía que afectan a la cuenca del río Bravo (conocido como "río Grande" en Estados Unidos). El actual ciclo vence el próximo 24 de octubre.
Al respecto, la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, afirmó: "En el caso de la entrega de agua, esto tiene que ver con su disponibilidad; si hay una cantidad de millones de metros cúbicos de agua que se puedan entregar. Pero, si no hay agua, ¿cómo la entregas?", se preguntó esta semana.
México confirmó que realizará entregas inmediatas de agua a Estados Unidos para saldar su deuda o, en términos del comunicado de la Cancillería mexicana, "mitigar el potencial faltante". Todo esto bajo las reglas del tratado de 1944 y de acuerdo con un procedimiento que se mantendrá durante la próxima temporada de lluvias.
El 'éxito' de la negociaciónAmbos países coincidieron en que "no se considera necesaria" la renegociación del tratado de 1944, según la Cancillería mexicana. Un punto que destaca Alfredo Granados Olivas, profesor de hidrología en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez.
"Lo primero que debemos tener en cuenta, como un éxito de esta negociación, es que ambos países acuerdan que el Tratado de 1944 no está sujeto a revisión. Es decir, no hubo incumplimiento ni se requiere modificar ese acuerdo binacional. Al contrario, es un documento muy valioso que permite flexibilidad. En lugar de estar centrados en la volumetría, es posible enfocarse en la flexibilidad del tratado", explica Granados.
El profesor subraya otro aspecto del acuerdo: la cantidad de agua que asignará el gobierno mexicano dependerá del próximo período de lluvias.
"Según otro de los puntos del acuerdo, a partir de mayo y hasta el cumplimiento del ciclo 36, que será en octubre de 2025, México deberá entregar o asignar volúmenes de agua a Estados Unidos que pueden variar entre 400 y 500 millones de metros cúbicos, casi 520 millones, para poder cumplir con la entrega".
La flexibilidad de este tratado permite el diálogo entre ambos países para distribuir el agua, incluida la que no se logró canalizar.
"Quisiera resaltar un factor importante: el tratado, y por eso es valioso, permite hacer derivaciones futuras de volúmenes pendientes de un ciclo a otro. Es decir, si en un ciclo anterior de cinco años no se logró cumplir con las entregas de 2.200 millones de metros cúbicos de agua, o un valor cercano, esa volumetría pendiente se puede trasladar a otro ciclo. El tratado permite considerar el factor tiempo gracias a su flexibilidad y así alcanzar acuerdos, sin que se bloqueen las negociaciones", concluye Alfredo Granados Olivas.
By RFI Español4.4
77 ratings
Según un tratado de 1944 entre México y Estados Unidos sobre el suministro mutuo de agua, ambos países deben compartir las aguas de los ríos Bravo y Colorado. Trump ha asegurado que México le debía agua a su país. Para saldar esa deuda, México se comprometió a realizar entregas inmediatas de agua a su vecino. Para el profesor de hidrología Alfredo Granados Olivas de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, entrevistado por RFI, el hecho de que no se haya renegociado ese Tratado 'es un éxito de la negociación'.
México adeuda el 70 % de los 2.156,6 millones de metros cúbicos que está obligado a entregar en ciclos de cinco años, argumentando largos períodos de sequía que afectan a la cuenca del río Bravo (conocido como "río Grande" en Estados Unidos). El actual ciclo vence el próximo 24 de octubre.
Al respecto, la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, afirmó: "En el caso de la entrega de agua, esto tiene que ver con su disponibilidad; si hay una cantidad de millones de metros cúbicos de agua que se puedan entregar. Pero, si no hay agua, ¿cómo la entregas?", se preguntó esta semana.
México confirmó que realizará entregas inmediatas de agua a Estados Unidos para saldar su deuda o, en términos del comunicado de la Cancillería mexicana, "mitigar el potencial faltante". Todo esto bajo las reglas del tratado de 1944 y de acuerdo con un procedimiento que se mantendrá durante la próxima temporada de lluvias.
El 'éxito' de la negociaciónAmbos países coincidieron en que "no se considera necesaria" la renegociación del tratado de 1944, según la Cancillería mexicana. Un punto que destaca Alfredo Granados Olivas, profesor de hidrología en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez.
"Lo primero que debemos tener en cuenta, como un éxito de esta negociación, es que ambos países acuerdan que el Tratado de 1944 no está sujeto a revisión. Es decir, no hubo incumplimiento ni se requiere modificar ese acuerdo binacional. Al contrario, es un documento muy valioso que permite flexibilidad. En lugar de estar centrados en la volumetría, es posible enfocarse en la flexibilidad del tratado", explica Granados.
El profesor subraya otro aspecto del acuerdo: la cantidad de agua que asignará el gobierno mexicano dependerá del próximo período de lluvias.
"Según otro de los puntos del acuerdo, a partir de mayo y hasta el cumplimiento del ciclo 36, que será en octubre de 2025, México deberá entregar o asignar volúmenes de agua a Estados Unidos que pueden variar entre 400 y 500 millones de metros cúbicos, casi 520 millones, para poder cumplir con la entrega".
La flexibilidad de este tratado permite el diálogo entre ambos países para distribuir el agua, incluida la que no se logró canalizar.
"Quisiera resaltar un factor importante: el tratado, y por eso es valioso, permite hacer derivaciones futuras de volúmenes pendientes de un ciclo a otro. Es decir, si en un ciclo anterior de cinco años no se logró cumplir con las entregas de 2.200 millones de metros cúbicos de agua, o un valor cercano, esa volumetría pendiente se puede trasladar a otro ciclo. El tratado permite considerar el factor tiempo gracias a su flexibilidad y así alcanzar acuerdos, sin que se bloqueen las negociaciones", concluye Alfredo Granados Olivas.

478 Listeners

4,437 Listeners

665 Listeners

186 Listeners

511 Listeners

111 Listeners

165 Listeners

77 Listeners

702 Listeners

0 Listeners

147 Listeners

841 Listeners

127 Listeners

0 Listeners

96 Listeners

0 Listeners

5 Listeners

0 Listeners

0 Listeners

0 Listeners

0 Listeners

0 Listeners

1 Listeners

0 Listeners

0 Listeners

1 Listeners

0 Listeners

0 Listeners

0 Listeners

0 Listeners

61 Listeners

1 Listeners

0 Listeners

208 Listeners